Las disciplinas de gestión del cambio y gestión de activos son intercambiables. La gestión de activos trata de aportar y mantener valor a medida que se consigue (se realiza), y la gestión del cambio es cómo llegamos al destino del valor sostenido.
Quiero compartir mis experiencias y conocimientos sobre lo que no ha funcionado y lo que sí ha funcionado. Mi propósito aquí es transferirle ese conocimiento para que pueda tomar decisiones informadas y entender la gestión del cambio como una capacidad esencial de una organización, pero también reconocer que todas las organizaciones del planeta ya están llevando a cabo la gestión de activos. Por esa parte, este libro pretende darle una ventaja en el mercado y ayudar a su organización a tener éxito en la entrega de valor a las partes interesadas.