Segunda entrega de la saga que se inició con la herencia de los sueños y ahora se presenta bajo una herencia nueva, la del deseo. No solo nos pautan en la vida nuestros sueños, también los deseos nos pueden conducir a nuestro destino. De una forma u otra ambos van conformando nuestra voluntad de hacer y de ser.
Ambas novelas en el ámbito de la ficción erótica, se desarrollan en un mundo imaginario ambientado en algunas prácticas de BDSM, en la que sus protagonistas se van abriendo cada vez más a sus fantasías. Sus sueños se suceden a sus realidades, y sus realidades son fruto de sus deseos algunos de los cuales deciden voluntariamente realizar.
Las historias que se inician en la herencia de los sueños tienen su continuidad en la herencia del deseo. No existiría la segunda parte sin su antecesora. Para el diseño de la saga se ha tenido en cuenta una evolución lógica y coherente, configurándose para ser leídas en el orden de publicación, para así poder comprender las evoluciones que experimentan los protagonistas en sus vivencias.