Hasta que no consigan detener al asesino, nadie puede sentirse a salvo.
Cuando la sheriff Bree Taggert descubre el cuerpo de una joven en el río, todas las pistas apuntan a un suicidio, especialmente la nota encontrada en el vehículo de la víctima. Sin embargo, la autopsia revela que Holly Thorpe había muerto mucho antes de caer del puente.
En su investigación, Bree y su colaborador Matt Flynn se enfrentan a la complicada y secreta vida personal de Holly. Su tormentoso matrimonio, la complicada relación con su hermana y la aventura amorosa nada discreta que mantenía con su jefe hacen que haya muchas personas con motivos suficientes para querer deshacerse de ella.
A medida que la sheriff avanza con su investigación, todas sus suposiciones saltan por los aires cuando una broma macabra se marca como objetivo a la hermana de Holly y hallan muerto al principal sospechoso del caso. Cuando el asesino decide poner su punto de mira en alguien de su entorno más próximo, Bree y Matt se lanzan a una carrera frenética para detenerlo antes de que se cobre la vida de su siguiente víctima.