En Brusseau un criminal atentado acaba con la vida de cien ciudadanos que viajaban en cinco líneas de autobuses interprovinciales.
En principio los esfuerzos del gobierno en el poder se encaminan a tratar de demostrar y adjudicar la autoría a la banda terrorista existente en la isla, pero comienza a aparecer evidencias que indican en otra línea: la yihadista.
Charles, un analista del SSD descubre que las opciones barajadas son falsas y que quien puede estar detrás del crimen puede ser una organización con mucho poder.
Cuando Steven comienza a investigar a raíz de la muerte "accidental" de Charles, en un accidente de circulación, descubre que nada es lo que parece y que detrás de los hechos están personas y organismos por encima del Poder.