Esta es la historia de muchas historias, algunas imaginadas y otras no tanto. Es el cuento de familias valientes, de seres mágicos, de amores que saltan generaciones, de personas viles, de aparecidos que nos tocan de vez en cuando. Este es un libro para recordar que la selva se nos mete dentro, marcando nuestra vida de colores tercos, libertad y violencia. Es el relato de una vorágine de tiempo y tierra, que nos invita a vivirla en el recuerdo, en la imaginación, en la realidad. Érika nos coge la mano con dulzura y una prosa exacta, a veces espumosa, y nos acompaña en un viaje que se va tornando umbrío a medida que avanzamos, sofocante como la misma selva, copioso de peligros y tormentos a los que casi nunca sabemos o queremos enfrentarnos.
Adolfo Gilaberte