Desde que Cass casi se ahoga (aunque se ahogó, pero no le gusta pensar en eso), puede retirar el velo que separa a los vivos de los muertos y entrar en el mundo de los espíritus. Su mejor amiga es incluso un fantasma. Entonces las cosas ya son bastante extrañas, pero están a punto de hacerse mucho más extrañas. Cuando los padres de Cass comienzan a organizar un programa de televisión sobre los lugares más encantados del mundo, la familia se dirige a Edimburgo, Escocia. Aquí, cementerios, castillos y pasadizos secretos se llenan de fantasmas inquietos. Y cuando Cass se encuentra con una chica que comparte su "don", se da cuenta de lo mucho que todavía tiene que aprender sobre el velo y sobre ella misma. Y tendrá que aprender rápido. La ciudad de los fantasmas es más peligrosa de lo que nunca imaginó.