EXORDIO (EL AUTOR SOBRE SU OBRA) Los pueblos, en su inacabable proceso de construcción civilizatorio establecen relaciones con la naturaleza, con la sociedad y consigo mismos; relaciones, por demás, que afectan y transforman. En ese proceso se diseñan formas de atender, valorar y confrontar las problemáticas derivadas de sus interrelaciones y esas formas de asumir la problemática son los elementos constitutivos de la cultura, entendiéndola como todo aquello que realizan seres humanos, siempre y cuando trascienda lo biológico. Es así que se asumen como elementos constitutivos de la cultura: modo de vida, idioma, tradiciones, normas, costumbres, la recreación y el deporte, la educación, creencias, tecnología, las artes, la literatura, etc. El pensamiento y el accionar político en las sociedades permean todos los elementos constitutivos de la cultura. En la vastedad de la literatura emerge y se hace consustancial con la naturaleza misma de los hombres y mujeres, ya con el dominio del lenguaje, instrumento básico y primario para la socialización y comprensión del abordaje de las distintas problemáticas, la poesía. Con ella cantamos; con ella lloramos; con ella abrazamos; con ella despertamos, sonreímos; con ella construimos la esperanza y con ella se asume el combate y se sobrevive en cualquier circunstancia; con ella nos nacen alas y nos hacemos libres. ha sido, es y será una respuesta al encarcelamiento, el terror, al horror; la ignominia, la tortura, el dolor, a la traición, al desamparo. es un desafío al grito de la impotencia. , alta expresión de gratitud por la solidaridad. , un monumento a la recuperación de la memoria por el . , canto donde revolotea la nostalgia. un canto desgarrador por la crucifixión en la cruz del olvido. (AUTOR)